Receta fácil: Cómo hacer pizza casera con harina común en 6 pasos

¿A quién no le gusta disfrutar de una deliciosa pizza casera? Si eres de los que piensa que hacer pizza en casa es complicado o requiere de ingredientes difíciles de encontrar, estás en el lugar correcto. En este artículo te enseñaremos una receta fácil para hacer pizza casera utilizando harina común, sin necesidad de ingredientes especiales o técnicas complicadas.

En este artículo aprenderás:

1. Los ingredientes necesarios para hacer la masa de pizza casera.

2. El paso a paso para preparar y amasar la masa de pizza.

3. Cómo hornear la pizza y agregar los ingredientes de tu elección.

Con esta receta, podrás disfrutar de una pizza casera deliciosa y personalizada, sin tener que salir de casa. ¡Comencemos!

📖 Índice de contenidos
  1. Preparar la masa mezclando harina, levadura, agua y sal
    1. Dejar reposar la masa durante 1 hora
    2. Dividir la masa en porciones y estirar
    3. Agregar los ingredientes y hornear
  2. Amasar la masa hasta que quede elástica y suave
  3. Estirar la masa y añadir los ingredientes
  4. Cocinar la pizza en el horno
  5. Dejar reposar la masa durante una hora para que fermente
    1. Ingredientes necesarios:
  6. Estirar la masa en forma de disco sobre una superficie enharinada
  7. Agregar salsa de tomate, queso y los ingredientes deseados
    1. Horneado de la pizza
  8. Hornear la pizza a alta temperatura durante 10-15 minutos, ¡y listo!
    1. Ingredientes:
    2. Paso 1: Preparar la masa
    3. Paso 2: Amasar la masa
    4. Paso 3: Dejar reposar la masa
    5. Paso 4: Precalentar el horno
    6. Paso 5: Estirar la masa
    7. Paso 6: Agregar los ingredientes y hornear
  9. Preguntas frecuentes
    1. 1. ¿Cuánto tiempo se tarda en hacer la pizza casera?
    2. 2. ¿Cuál es la temperatura ideal para hornear la pizza?
    3. 3. ¿Puedo usar levadura instantánea en lugar de levadura fresca?
    4. 4. ¿Puedo hacer la pizza sin utilizar una piedra para pizza?

Preparar la masa mezclando harina, levadura, agua y sal

Para empezar a preparar la masa de nuestra deliciosa pizza casera, necesitaremos los siguientes ingredientes:

  • 300 gramos de harina común
  • 5 gramos de levadura seca
  • 200 ml de agua tibia
  • 1 cucharadita de sal

En un recipiente grande, mezcla la harina, la levadura y la sal. Asegúrate de que estén bien integrados.

Después, añade el agua tibia poco a poco mientras mezclas con una cuchara de madera. Continúa mezclando hasta que la masa comience a formarse.

En este punto, es importante amasar la masa con las manos durante unos minutos hasta obtener una textura suave y elástica. Si la masa se pega demasiado a tus manos, puedes añadir un poco más de harina para facilitar el proceso.

Dejar reposar la masa durante 1 hora

Una vez que hayamos obtenido la textura deseada, es hora de dejar reposar la masa. Cubre el recipiente con un paño limpio y déjalo reposar en un lugar cálido durante aproximadamente una hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.

Dividir la masa en porciones y estirar

Una vez que la masa haya reposado y haya aumentado de tamaño, es momento de dividirla en porciones. Dependiendo del tamaño de la pizza que desees hacer, puedes dividir la masa en dos o tres porciones.

Toma una porción de masa y, en una superficie enharinada, comienza a estirarla con un rodillo. Si no tienes rodillo, también puedes usar las manos para estirar la masa, dándole forma circular o rectangular según tus preferencias.

Recuerda que mientras estiras la masa, es importante mantenerla enharinada para evitar que se pegue a la superficie de trabajo.

Agregar los ingredientes y hornear

Una vez que hayas estirado la masa, colócala en una bandeja para horno previamente engrasada o cubierta con papel de hornear. Ahora es el momento de añadir los ingredientes que más te gusten: salsa de tomate, queso, jamón, champiñones, etc.

Finalmente, lleva la pizza al horno precalentado a 200 grados Celsius y hornea durante aproximadamente 15-20 minutos, o hasta que la masa esté dorada y los ingredientes estén bien cocidos.

¡Y listo! Ya tienes tu deliciosa pizza casera con harina común. ¡Disfrútala con tus amigos y familiares!

Amasar la masa hasta que quede elástica y suave

La base de una buena pizza casera está en la masa. Para hacerla, necesitarás harina común, agua tibia, levadura, sal y un poco de azúcar. En un recipiente, mezcla la harina con la sal y el azúcar. Añade la levadura disuelta en agua tibia y comienza a amasar.

El secreto para lograr una masa perfecta es amasarla durante unos buenos minutos, hasta que quede elástica y suave. Esto se logra mediante movimientos firmes y constantes, estirando y doblando la masa repetidamente.

Una vez que la masa esté lista, forma una bola y colócala en un recipiente ligeramente engrasado. Cubre con un paño limpio y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente una hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.

Estirar la masa y añadir los ingredientes

Una vez que la masa haya reposado y haya crecido, es hora de estirarla. Espolvorea un poco de harina sobre la superficie de trabajo y coloca la masa encima. Con las manos o un rodillo, estira la masa hasta obtener el grosor deseado.

Una vez que la masa esté estirada, es hora de añadir los ingredientes. Puedes usar salsa de tomate, queso mozzarella y cualquier otro ingrediente que te guste, como jamón, champiñones, aceitunas, etc.

Distribuye los ingredientes de manera uniforme sobre la masa, dejando un borde libre alrededor. Esto ayudará a que la pizza no se desborde durante la cocción.

Cocinar la pizza en el horno

Una vez que hayas añadido los ingredientes, precalienta el horno a una temperatura alta, alrededor de 220°C. Coloca la pizza en una bandeja o directamente sobre la rejilla del horno y hornea durante unos 10-15 minutos, o hasta que la masa esté dorada y crujiente.

¡Y listo! Ya tienes tu pizza casera lista para disfrutar. Sirve caliente y acompaña con una ensalada fresca o simplemente disfrútala por sí sola. ¡Buen provecho!

Dejar reposar la masa durante una hora para que fermente

Para comenzar a hacer una deliciosa pizza casera con harina común, es importante dejar reposar la masa durante una hora para que fermente adecuadamente. Este paso es crucial, ya que permitirá que la masa obtenga una textura suave y esponjosa.

Ingredientes necesarios:

  • 500 gramos de harina común
  • 1 sobre de levadura instantánea
  • 1 cucharadita de sal
  • 1 cucharadita de azúcar
  • 300 ml de agua tibia
  • 2 cucharadas de aceite de oliva

Paso 1: En un recipiente grande, mezclar la harina común, la levadura instantánea, la sal y el azúcar. Hacer un hueco en el centro y agregar el agua tibia y el aceite de oliva. Mezclar todos los ingredientes hasta obtener una masa homogénea.

Paso 2: Amasar la masa durante unos 10 minutos, hasta que esté suave y elástica. Agregar un poco más de harina si es necesario para evitar que se pegue. Una vez lista, formar una bola con la masa.

Paso 3: Colocar la masa en un recipiente ligeramente engrasado y cubrirlo con un paño húmedo. Dejar reposar la masa en un lugar cálido durante una hora, o hasta que duplique su tamaño.

Paso 4: Precalentar el horno a 220 grados Celsius.

Paso 5: Dividir la masa en dos partes iguales. En una superficie enharinada, estirar cada porción de masa con un rodillo hasta obtener el tamaño y grosor deseado para la pizza.

Paso 6: Colocar la masa estirada en una bandeja para horno previamente engrasada. Agregar los ingredientes de tu elección (salsa de tomate, queso, jamón, champiñones, etc.) y hornear durante 15-20 minutos, o hasta que la pizza esté dorada y crujiente.

¡Y listo! Ahora puedes disfrutar de una deliciosa pizza casera hecha con harina común siguiendo estos sencillos pasos. Recuerda que puedes personalizarla con tus ingredientes favoritos y sorprender a tus seres queridos con tu talento culinario.

Estirar la masa en forma de disco sobre una superficie enharinada

Una vez que hayas preparado la masa de pizza, el siguiente paso es estirarla en forma de disco. Para esto, es recomendable tener una superficie enharinada, como una tabla de cortar o una encimera. Espolvorea un poco de harina sobre la superficie para evitar que la masa se pegue.

Coloca la masa en el centro de la superficie enharinada y comienza a estirarla con la ayuda de un rodillo. Trabaja desde el centro hacia los bordes, aplicando una ligera presión. Asegúrate de ir girando la masa constantemente para lograr un disco uniforme.

Recuerda que la masa debe tener un espesor de aproximadamente 0,5 cm. Si prefieres una pizza más delgada, puedes estirarla aún más. Si quieres una pizza más gruesa, deja la masa un poco más gruesa.

Una vez que hayas estirado la masa en forma de disco, puedes transferirla a una bandeja para pizza o a una piedra para hornear. Si utilizas una bandeja para pizza, asegúrate de enharinarla ligeramente para facilitar el desprendimiento de la pizza una vez horneada.

Recuerda que este es solo uno de los pasos para hacer una deliciosa pizza casera. Si quieres conocer los demás pasos, no te pierdas el resto de la receta.

Agregar salsa de tomate, queso y los ingredientes deseados

Una vez que tengas la masa de pizza lista, es momento de agregar la salsa de tomate. Puedes utilizar una salsa comercial o preparar la tuya propia con tomates frescos, aceite de oliva, ajo y especias al gusto. Extiende la salsa sobre la superficie de la masa, asegurándote de cubrir toda la superficie de manera uniforme.

A continuación, es hora de añadir el queso. Puedes utilizar mozzarella rallada, que es la opción más tradicional, o experimentar con otros tipos de quesos como cheddar, gouda o incluso queso azul si te gusta el sabor más fuerte. Espolvorea generosamente el queso sobre la salsa de tomate, cubriendo toda la superficie de la pizza.

Una vez que hayas agregado la salsa y el queso, es momento de añadir los ingredientes que desees. Puedes optar por los clásicos como pepperoni, champiñones, pimientos, cebolla o aceitunas. Si quieres algo más creativo, puedes probar con ingredientes como camarones, piña, espinacas o incluso huevo. Distribuye los ingredientes de manera uniforme sobre la pizza, asegurándote de no sobrecargarla para que se cocine de manera adecuada.

Horneado de la pizza

Una vez que hayas añadido los ingredientes, es momento de hornear la pizza. Precalienta el horno a una temperatura alta, alrededor de 220°C. Coloca la pizza en una bandeja para horno o directamente sobre la rejilla del horno si prefieres una base más crujiente.

Deja que la pizza se hornee durante aproximadamente 10-15 minutos, o hasta que el queso esté derretido y ligeramente dorado. El tiempo de cocción puede variar según el horno, así que asegúrate de estar pendiente para evitar que se queme.

Una vez que la pizza esté lista, retírala del horno con cuidado utilizando guantes de cocina para evitar quemaduras. Deja que se enfríe durante unos minutos antes de cortarla en porciones y servirla.

¡Y eso es todo! Siguiendo estos sencillos pasos, podrás disfrutar de una deliciosa pizza casera con harina común. Recuerda que puedes experimentar con distintos ingredientes y sabores para personalizar tu pizza a tu gusto. ¡Buen provecho!

Hornear la pizza a alta temperatura durante 10-15 minutos, ¡y listo!

Si eres amante de la pizza y te encanta disfrutar de una deliciosa y casera, ¡has llegado al lugar correcto! En este artículo te enseñaremos una receta fácil para hacer pizza casera con harina común en tan solo 6 pasos. Así que prepárate para disfrutar de una pizza hecha por ti mismo/a, con ingredientes frescos y sabores irresistibles.

Ingredientes:

  • 300 gramos de harina común
  • 200 ml de agua tibia
  • 5 gramos de levadura seca
  • 1 cucharadita de sal
  • 2 cucharadas de aceite de oliva

Paso 1: Preparar la masa

En un recipiente, mezcla la harina común con la levadura seca y la sal. Agrega el agua tibia y el aceite de oliva. Mezcla todo con una cuchara hasta formar una masa homogénea.

Paso 2: Amasar la masa

Coloca la masa en una superficie enharinada y amásala durante aproximadamente 5 minutos, hasta que esté suave y elástica. Si la masa está demasiado pegajosa, agrega un poco más de harina.

Paso 3: Dejar reposar la masa

Coloca la masa en un recipiente ligeramente engrasado con aceite de oliva. Cubre el recipiente con un paño húmedo y deja reposar la masa en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que duplique su tamaño.

Paso 4: Precalentar el horno

Prende el horno a la temperatura más alta posible y déjalo precalentar durante al menos 15 minutos. Esto ayudará a que la pizza se hornee de manera rápida y quede crujiente por fuera.

Paso 5: Estirar la masa

Coloca la masa en una superficie enharinada y estírala con un rodillo hasta obtener el grosor deseado. Recuerda que puedes hacerla más delgada si prefieres una pizza más crujiente, o más gruesa si prefieres una pizza más esponjosa.

Paso 6: Agregar los ingredientes y hornear

Coloca la masa estirada en una bandeja para horno previamente engrasada o cubierta con papel para hornear. Agrega tus ingredientes favoritos, como salsa de tomate, queso, jamón, champiñones, etc. Luego, hornea la pizza en el horno precalentado a alta temperatura durante 10-15 minutos, o hasta que esté dorada y los ingredientes estén bien cocidos.

¡Y voilà! Ahora solo queda cortar la pizza en porciones, servir y disfrutar de tu deliciosa pizza casera hecha con harina común. Recuerda que puedes agregar tus ingredientes favoritos y personalizarla a tu gusto. ¿A qué esperas para probar esta receta fácil y sabrosa? ¡Buen provecho!

Preguntas frecuentes

1. ¿Cuánto tiempo se tarda en hacer la pizza casera?

El tiempo total de preparación y cocción suele ser de aproximadamente 1 hora.

2. ¿Cuál es la temperatura ideal para hornear la pizza?

La temperatura ideal es de 220°C (425°F) para conseguir una base crujiente y un queso bien derretido.

3. ¿Puedo usar levadura instantánea en lugar de levadura fresca?

Sí, puedes usar levadura instantánea en lugar de levadura fresca. Solo debes seguir las instrucciones de la levadura instantánea en cuanto a la cantidad necesaria.

4. ¿Puedo hacer la pizza sin utilizar una piedra para pizza?

Sí, puedes hacer la pizza sin una piedra para pizza. Puedes utilizar una bandeja para hornear o una parrilla como base para cocinarla.

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