Receta de pizza casera: la mejor pizza en casa con un kilo de harina
La pizza es uno de los platillos más populares en el mundo y cada vez más personas se animan a hacerla en casa. Además de ser deliciosa, preparar pizza casera tiene la ventaja de poder personalizarla a nuestro gusto y disfrutarla en la comodidad de nuestro hogar. Sin embargo, muchas veces nos encontramos con recetas complicadas o ingredientes difíciles de encontrar. En este artículo te mostraremos cómo hacer la mejor pizza casera utilizando un kilo de harina, un ingrediente básico que seguro tienes en tu despensa.
Te enseñaremos paso a paso cómo preparar una deliciosa pizza en casa utilizando un kilo de harina. Veremos cómo hacer la masa de pizza desde cero, cómo estirarla correctamente y qué ingredientes utilizar para obtener un resultado delicioso. Además, te daremos algunos consejos y trucos para lograr una pizza perfecta, como el tiempo de fermentación ideal para la masa y cómo lograr una buena combinación de sabores. Sigue leyendo y descubre cómo convertirte en un experto pizzero en la comodidad de tu cocina.
- Prepara la masa mezclando la harina, la levadura, la sal y el agua templada
- Amasa hasta obtener una masa suave y elástica
- Deja reposar la masa en un lugar cálido durante una hora
- Estira la masa con un rodillo y colócala en una bandeja de horno
- Prepara una salsa de tomate casera con tomates, cebolla, ajo y especias
- Extiende la salsa de tomate sobre la masa
- Agrega tus ingredientes favoritos: queso, jamón, champiñones, etc
- Hornea la pizza a 220 grados durante 15-20 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente
- Disfruta de la mejor pizza casera en casa
- Preguntas frecuentes
Prepara la masa mezclando la harina, la levadura, la sal y el agua templada
Para empezar a preparar la masa de nuestra pizza casera, necesitaremos un kilo de harina. En un recipiente grande, mezcla la harina con 10 gramos de levadura fresca desmenuzada y una cucharada de sal.
Agrega poco a poco 500 ml de agua templada y comienza a mezclar con una cuchara de madera hasta que los ingredientes estén bien integrados.
Una vez que la masa comience a tomar forma, puedes pasarla a una superficie enharinada y amasar durante unos 10 minutos o hasta que obtengas una masa suave y elástica.
Deja reposar la masa durante una hora
Una vez que hayas terminado de amasar la masa, forma una bola con ella y colócala en un recipiente grande previamente enharinado. Cubre el recipiente con un paño húmedo y deja reposar la masa en un lugar cálido durante aproximadamente una hora, o hasta que haya duplicado su tamaño.
Divide la masa y forma las bases de las pizzas
Una vez que la masa haya reposado lo suficiente, divídela en porciones más pequeñas según el tamaño de las pizzas que desees hacer. Puedes hacer una o varias pizzas con la cantidad de masa que has preparado.
En una superficie enharinada, toma una porción de masa y estírala con un rodillo hasta obtener el grosor deseado para la base de tu pizza. Recuerda que si deseas una pizza más delgada, deberás estirar la masa más fina.
Agrega tus ingredientes favoritos y hornea
Una vez que hayas formado la base de tu pizza, es hora de agregar tus ingredientes favoritos. Puedes utilizar salsa de tomate, mozzarella, pepperoni, champiñones, aceitunas, jamón, entre otros.
Prende tu horno a la temperatura más alta que alcance y coloca la pizza en una bandeja enharinada o directamente sobre una piedra para pizza. Hornea durante aproximadamente 10-12 minutos, o hasta que la masa esté dorada y los ingredientes estén bien cocidos.
Saca la pizza del horno, déjala enfriar durante unos minutos y ¡disfruta de la mejor pizza casera!
Amasa hasta obtener una masa suave y elástica
Para hacer la mejor pizza casera, necesitarás amasar la masa hasta obtener una textura suave y elástica. Esto es crucial para lograr una base perfecta que se hornee de manera uniforme.
Comienza por reunir todos los ingredientes necesarios: un kilo de harina, una cucharada de sal, una cucharada de azúcar, 25 gramos de levadura fresca, 600 ml de agua tibia y 50 ml de aceite de oliva.
Paso 1: En un tazón grande, mezcla la harina, la sal y el azúcar. Haz un hueco en el centro y desmenuza la levadura fresca en él.
Paso 2: Agrega el agua tibia gradualmente, mientras mezclas los ingredientes desde el centro hacia los bordes del tazón. Continúa mezclando hasta formar una masa pegajosa.
Paso 3: Amasa la masa en una superficie enharinada durante al menos 10 minutos, o hasta que se vuelva suave y elástica. Puedes utilizar la técnica de doblar y estirar la masa para ayudar a desarrollar el gluten y lograr una textura perfecta.
Paso 4: Una vez que la masa esté lista, colócala en un tazón engrasado con aceite de oliva y cúbrelo con un paño limpio. Deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente una hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
Paso 5: Después de que la masa haya levado, vuelve a amasarla brevemente para eliminar el exceso de aire. Luego, divídela en porciones más pequeñas según el tamaño de las pizzas que deseas hacer.
Paso 6: Estira cada porción de masa con un rodillo o tus manos, formando círculos o rectángulos delgados. Coloca las bases de pizza en bandejas para hornear previamente engrasadas.
Paso 7: Ahora, estás listo para agregar tus ingredientes favoritos y hornear la pizza en un horno precalentado a 220 grados Celsius durante aproximadamente 15-20 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente.
¡Disfruta de la mejor pizza casera que hayas probado jamás, gracias a esta deliciosa receta!
Deja reposar la masa en un lugar cálido durante una hora
Una de las claves para obtener una deliciosa pizza casera es dejar reposar la masa en un lugar cálido durante al menos una hora. Este tiempo de reposo permitirá que la levadura fermente y la masa adquiera una textura esponjosa y un sabor más pronunciado.
Ingredientes para la masa de pizza
- 1 kilo de harina
- 30 gramos de levadura fresca
- 1 cucharada de sal
- 1 cucharadita de azúcar
- 600 ml de agua tibia
Para preparar la masa de pizza necesitarás 1 kilo de harina. Puedes utilizar harina de trigo común o harina de fuerza, que le dará a la masa una mayor elasticidad. En un recipiente grande, desmenuza 30 gramos de levadura fresca y añade 1 cucharadita de azúcar para ayudar a activar la levadura. Añade también 1 cucharada de sal para darle sabor a la masa.
En otro recipiente, mezcla 600 ml de agua tibia, que debe estar a una temperatura de aproximadamente 38°C. Vierte esta mezcla líquida sobre los ingredientes secos y comienza a mezclar con una cuchara de madera o con las manos hasta que los ingredientes se hayan integrado por completo.
Paso a paso para preparar la masa de pizza casera
- En un recipiente grande, desmenuza la levadura fresca y añade el azúcar y la sal.
- En otro recipiente, mezcla el agua tibia y viértela sobre los ingredientes secos.
- Comienza a mezclar con una cuchara de madera o con las manos hasta que los ingredientes se integren por completo.
- Una vez que la masa esté lista, amásala durante unos minutos hasta que esté suave y elástica.
- Forma una bola con la masa y colócala en un recipiente ligeramente engrasado.
- Cubre el recipiente con un paño húmedo y deja reposar en un lugar cálido durante una hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
Una vez que la masa haya reposado durante una hora y haya duplicado su tamaño, estará lista para ser utilizada. Puedes dividirla en porciones más pequeñas si deseas hacer varias pizzas individuales, o utilizarla en su totalidad para hacer una pizza grande.
Recuerda que la clave para obtener la mejor pizza casera está en la calidad de los ingredientes y en el tiempo de reposo de la masa. ¡Disfruta de tu pizza casera con un kilo de harina!
Estira la masa con un rodillo y colócala en una bandeja de horno
Una vez que hayas preparado la masa de la pizza casera, es hora de estirarla. Para ello, necesitarás un rodillo de cocina y un poco de harina extra para evitar que se pegue.
Comienza espolvoreando un poco de harina sobre una superficie plana y limpia. Coloca la masa sobre la harina y aplana suavemente con las manos para darle forma redonda. Luego, toma el rodillo y comienza a estirar la masa desde el centro hacia los bordes, aplicando una presión uniforme.
Recuerda que la masa debe tener un grosor de aproximadamente medio centímetro para que la pizza quede crujiente por fuera y suave por dentro. Si es necesario, agrega más harina durante el proceso para evitar que se pegue.
Una vez que hayas estirado la masa lo suficiente, colócala en una bandeja de horno previamente engrasada con un poco de aceite. Asegúrate de que la masa cubra completamente la bandeja, presionando suavemente los bordes para formar una especie de borde.
¡Listo! Ahora la masa de tu pizza casera está lista para ser cubierta con tus ingredientes favoritos y llevada al horno.
Prepara una salsa de tomate casera con tomates, cebolla, ajo y especias
Para preparar una deliciosa salsa de tomate casera, necesitarás los siguientes ingredientes:
- Tomates: utiliza tomates maduros y jugosos, de preferencia tipo pera o roma.
- Cebolla: una cebolla mediana, picada finamente.
- Ajo: 2 dientes de ajo, también picados finamente.
- Especias: puedes utilizar una combinación de orégano, albahaca, tomillo y pimienta negra al gusto.
Para empezar, hierve agua en una olla grande. Haz una incisión en la base de cada tomate y sumérgelos en el agua hirviendo durante unos segundos. Luego, retíralos y pásalos por agua fría para detener la cocción.
Pela los tomates y córtalos en trozos pequeños. En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva y agrega la cebolla picada. Cocina a fuego medio hasta que la cebolla esté transparente.
Agrega el ajo picado y cocina por un par de minutos más. Luego, añade los tomates y las especias. Deja que la salsa hierva y luego reduce el fuego a medio-bajo. Cocina a fuego lento durante al menos 30 minutos, removiendo de vez en cuando.
Una vez que la salsa haya espesado y los sabores se hayan concentrado, retírala del fuego y déjala enfriar antes de utilizarla como base para tu pizza casera.
Extiende la salsa de tomate sobre la masa
Una vez que hayas preparado la masa de pizza casera según nuestra receta, llega el momento de darle sabor con una deliciosa salsa de tomate. Para ello, extiende generosamente la salsa sobre la masa, asegurándote de cubrir toda la superficie.
La salsa de tomate es uno de los ingredientes clave para lograr una pizza con un sabor auténtico. Puedes utilizar una salsa de tomate comercial o hacerla tú mismo, cocinando tomates frescos con especias y hierbas al gusto. Si optas por hacerla casera, te recomendamos utilizar tomates maduros y pelados para obtener una salsa más suave y sabrosa.
Es importante distribuir la salsa de manera uniforme sobre la masa. Puedes utilizar una cuchara o un pincel de cocina para extenderla de manera prolija. Asegúrate de cubrir toda la superficie, pero evita poner demasiada salsa, ya que puede hacer que la pizza quede empapada y difícil de manejar.
Si te gusta el sabor intenso del tomate, puedes agregar un poco de pasta de tomate a la salsa para darle un toque extra. También puedes condimentar la salsa con sal, pimienta, ajo en polvo, orégano y otras especias al gusto. Recuerda que la salsa de tomate es la base sobre la cual se construye el sabor de tu pizza, así que asegúrate de que esté bien sazonada y deliciosa.
Agrega tus ingredientes favoritos: queso, jamón, champiñones, etc
Si eres amante de la pizza, seguramente te has preguntado cómo hacer la mejor pizza en casa. Con esta receta de pizza casera, podrás disfrutar de una deliciosa pizza hecha con un kilo de harina y todos los ingredientes que más te gusten. ¡Prepárate para sorprender a tus invitados y disfrutar de un festín de sabores!
Ingredientes:
- 1 kilo de harina
- 25 gramos de levadura fresca
- 600 ml de agua tibia
- 2 cucharadas de sal
- 2 cucharadas de azúcar
- 4 cucharadas de aceite de oliva
Paso 1: En un recipiente grande, disuelve la levadura fresca en el agua tibia. Añade el azúcar y mezcla bien. Deja reposar durante unos minutos hasta que la levadura se active y se forme una espuma en la superficie.
Paso 2: En otro recipiente, mezcla la harina y la sal. Haz un hueco en el centro y vierte la levadura activada y el aceite de oliva. Comienza a mezclar con una cuchara de madera hasta que los ingredientes estén bien integrados.
Paso 3: Amasa la masa durante unos minutos hasta que esté suave y elástica. Si la masa está demasiado pegajosa, añade un poco más de harina. Si está demasiado seca, añade un poco más de agua tibia. Cubre la masa con un paño húmedo y deja reposar en un lugar cálido durante al menos una hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
Paso 4: Precalienta el horno a 220 grados Celsius. Divide la masa en porciones y estíralas en forma de disco con un rodillo. Coloca los discos de masa en una bandeja para horno previamente engrasada.
Paso 5: Ahora viene la parte divertida: ¡agrega tus ingredientes favoritos! Puedes usar queso mozarella rallado, jamón, champiñones, aceitunas, pimientos, cebolla, tomate, etc. La elección es tuya. ¡Sé creativo!
Paso 6: Lleva la pizza al horno durante unos 15-20 minutos, o hasta que el queso esté derretido y la masa esté dorada y crujiente. ¡Y listo! Ya tienes tu pizza casera lista para disfrutar.
Con esta receta de pizza casera, podrás deleitar a tus invitados y disfrutar de una pizza hecha con amor y los ingredientes que más te gusten. ¡No hay nada mejor que una pizza casera para compartir momentos especiales con familia y amigos!
Hornea la pizza a 220 grados durante 15-20 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente
Si eres amante de la pizza, seguramente te encantaría poder disfrutar de una deliciosa pizza casera en la comodidad de tu hogar. Con tan solo un kilo de harina y algunos ingredientes adicionales, podrás preparar la mejor pizza casera que hayas probado. ¡Sigue esta receta y sorprende a tus familiares y amigos con una pizza hecha por ti mismo!
Ingredientes:
- 1 kilo de harina*
- 25 gramos de levadura*
- 600 ml de agua*
- 2 cucharadas de sal*
- 2 cucharadas de azúcar*
- 4 cucharadas de aceite de oliva*
Para empezar, en un recipiente grande, mezcla la harina con la levadura desmenuzada. Agrega el agua tibia poco a poco mientras mezclas con tus manos hasta obtener una masa homogénea*. Añade la sal, el azúcar y el aceite de oliva. Sigue amasando la masa durante aproximadamente 10 minutos, hasta que esté suave y elástica*.
Cubre la masa con un paño limpio y deja reposar en un lugar cálido durante al menos una hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño*. Esto permitirá que la levadura fermente y la masa se vuelva más esponjosa y sabrosa.
Una vez que la masa haya reposado, divídela en porciones del tamaño de una bola de tenis. Estira cada porción con un rodillo hasta obtener la forma deseada para tu pizza*. Si prefieres una base más gruesa, no la estires demasiado. Si te gusta una base más delgada y crujiente, estírala lo más fino posible.
Una vez que tengas la base de pizza lista, puedes agregar tus ingredientes favoritos*. Desde salsa de tomate, queso mozzarella, pepperoni, champiñones, jamón, pimientos y cualquier otra combinación de ingredientes que se te antoje*. Recuerda no excederte con los ingredientes, ya que una pizza con demasiados ingredientes puede volverse difícil de manejar y no se cocinará de manera adecuada.
Coloca la pizza en una bandeja para horno previamente enharinada*. Hornea la pizza a 220 grados durante 15-20 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente*. Retira del horno y deja enfriar unos minutos antes de cortarla y servirla. ¡Disfruta de tu deliciosa pizza casera!
*Ingredientes o pasos importantes que debes tener en cuenta para el éxito de tu pizza casera.
Disfruta de la mejor pizza casera en casa
Si eres amante de la pizza, seguro que te encantará saber cómo hacer la mejor pizza casera en la comodidad de tu hogar. Y lo mejor de todo es que solo necesitarás un kilo de harina para prepararla.
Ingredientes
- 1 kilo de harina*
- 20 gramos de levadura*
- 600 ml de agua*
- Sal al gusto*
- 200 ml de salsa de tomate*
- Mozzarella rallada*
- Ingredientes opcionales: jamón, champiñones, aceitunas, etc.
* Los ingredientes marcados con asterisco son fundamentales para el éxito de tu pizza casera.
Preparación
- En un recipiente grande, mezcla la harina y la sal.
- En otro recipiente pequeño, disuelve la levadura en agua tibia y deja reposar durante unos minutos hasta que empiece a burbujear.
- Vierte la mezcla de levadura en el recipiente de harina y comienza a amasar hasta obtener una masa suave y elástica.
- Cubre la masa con un paño húmedo y déjala reposar en un lugar cálido durante al menos una hora, o hasta que duplique su tamaño.
- Divide la masa en porciones del tamaño deseado y estíralas con un rodillo sobre una superficie enharinada.
- Coloca la masa estirada en una bandeja para hornear previamente engrasada o cubierta con papel de hornear.
- Extiende la salsa de tomate sobre la masa y añade los ingredientes de tu elección, como mozzarella rallada, jamón, champiñones, aceitunas, etc.
- Hornea la pizza en un horno precalentado a 220°C durante aproximadamente 15-20 minutos, o hasta que la masa esté dorada y los ingredientes estén bien cocidos.
- Saca la pizza del horno y deja que se enfríe un poco antes de cortarla y disfrutarla.
¡Y eso es todo! Ahora puedes disfrutar de la mejor pizza casera en casa, con un kilo de harina y los ingredientes que más te gusten. ¡Buen provecho!
Preguntas frecuentes
¿Cuántas porciones de pizza puedo hacer con un kilo de harina?
Con un kilo de harina puedes hacer aproximadamente 8 porciones de pizza.
¿Cuál es la temperatura ideal para hornear la pizza casera?
La temperatura ideal para hornear la pizza casera es de 220 grados Celsius.
¿Cuánto tiempo debo dejar reposar la masa de pizza antes de usarla?
Es recomendable dejar reposar la masa de pizza durante al menos una hora antes de usarla.
¿Cuánto tiempo de cocción necesita una pizza casera en el horno?
Una pizza casera necesita aproximadamente 12-15 minutos de cocción en el horno, o hasta que la masa esté dorada y crujiente.
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