Deliciosa receta de pizza con rúcula y prosciutto
La pizza es uno de los platillos más populares y versátiles de la cocina italiana. Su deliciosa masa crujiente y su amplia variedad de ingredientes la convierten en una opción perfecta para compartir en cualquier ocasión. En esta ocasión, te traemos una receta de pizza con rúcula y prosciutto, una combinación de sabores que hará que tus papilas gustativas se deleiten.
A lo largo de este artículo, te mostraremos cómo preparar una deliciosa pizza casera con una base de masa fina y crujiente. Además, te daremos todos los detalles para añadir los ingredientes adecuados, como el queso mozzarella, la rúcula fresca y el prosciutto, un jamón italiano con un sabor intenso y delicado. Te explicaremos paso a paso cómo hacer la masa, cómo extenderla y cómo hornearla para obtener el resultado perfecto. ¡Prepárate para disfrutar de una pizza única y llena de sabor!
- Prepara la masa de pizza mezclando harina, levadura, agua y sal
- Amasa la masa hasta obtener una consistencia suave y elástica
- Deja reposar la masa en un lugar cálido durante una hora, hasta que duplique su tamaño
- Extiende la masa en una bandeja para pizza previamente engrasada
- Cubre la masa con salsa de tomate y espolvorea queso mozzarella
- Agrega rúcula fresca y prosciutto en lonchas finas
- Rocía un poco de aceite de oliva por encima de la pizza
- Hornea la pizza en un horno precalentado a 220°C durante 12-15 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente
- Retira la pizza del horno y deja enfriar antes de cortarla y servirla
- Disfruta de una deliciosa pizza casera con rúcula y prosciutto
- Preguntas frecuentes
Prepara la masa de pizza mezclando harina, levadura, agua y sal
Para preparar la deliciosa masa de pizza con rúcula y prosciutto, primero necesitarás mezclar los ingredientes principales. En un recipiente grande, combina 500 gramos de harina, 10 gramos de levadura disuelta en 325 ml de agua tibia y 10 gramos de sal.
Es importante que la levadura esté bien disuelta en el agua tibia para asegurar que la masa de pizza suba correctamente. Puedes ayudarte de una cuchara o tenedor para mezclar los ingredientes hasta obtener una masa homogénea.
Deja reposar la masa durante una hora
Una vez que hayas mezclado todos los ingredientes, cubre el recipiente con un paño limpio y deja reposar la masa durante una hora. Durante este tiempo, la levadura hará su trabajo y la masa crecerá, volviéndose más esponjosa y fácil de trabajar.
Estira la masa y añade los ingredientes
Después de que la masa haya reposado, es momento de estirarla y añadir los deliciosos ingredientes. Espolvorea un poco de harina sobre una superficie plana y coloca la masa encima. Con la ayuda de tus manos o un rodillo, estira la masa hasta obtener el grosor deseado.
Ahora viene la parte divertida: añadir los ingredientes. Unta salsa de tomate sobre la masa, esparciéndola de manera uniforme. A continuación, añade rúcula fresca, prosciutto en lonchas y queso mozzarella rallado. Puedes agregar también otros ingredientes como aceitunas o champiñones si lo deseas.
Hornea la pizza hasta que esté dorada y crujiente
Una vez que hayas añadido todos los ingredientes, precalienta el horno a 220 grados Celsius. Coloca la pizza en una bandeja para hornear y métela en el horno durante aproximadamente 15-20 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente.
¡Y listo! Ya tienes lista tu deliciosa pizza con rúcula y prosciutto. Sirve caliente y disfruta de una explosión de sabores en cada bocado.
Amasa la masa hasta obtener una consistencia suave y elástica
Para comenzar a preparar la deliciosa receta de pizza con rúcula y prosciutto, lo primero que debes hacer es amasar la masa. Esta será la base perfecta para todos los ingredientes que agregarás más adelante. Para lograr una consistencia suave y elástica, es importante seguir los siguientes pasos:
- Ingredientes necesarios: 500 gramos de harina de trigo, 300 ml de agua tibia, 10 gramos de sal, 25 gramos de levadura fresca y 1 cucharada de aceite de oliva.
- Paso 1: En un recipiente grande, coloca la harina de trigo y haz un hueco en el centro.
- Paso 2: Disuelve la levadura fresca en el agua tibia y viértela en el hueco de la harina.
- Paso 3: Agrega la sal y el aceite de oliva al recipiente.
- Paso 4: Con ayuda de tus manos o de una espátula, comienza a mezclar todos los ingredientes hasta obtener una masa pegajosa.
- Paso 5: Transfiere la masa a una superficie enharinada y comienza a amasar durante aproximadamente 10 minutos. La masa debe volverse suave y elástica.
- Paso 6: Una vez que la masa esté lista, colócala en un recipiente previamente engrasado con aceite de oliva y cúbrelo con un paño húmedo. Deja que repose durante al menos 1 hora para que fermente y aumente su volumen.
Una vez que la masa haya reposado y esté lista, podrás continuar con el siguiente paso de la receta.
Deja reposar la masa en un lugar cálido durante una hora, hasta que duplique su tamaño
Para preparar la deliciosa receta de pizza con rúcula y prosciutto, lo primero que debes hacer es dejar reposar la masa en un lugar cálido durante una hora, hasta que duplique su tamaño.
Una vez que la masa ha reposado adecuadamente, puedes comenzar a preparar los ingredientes para tu pizza. Aquí te dejamos una lista de lo que necesitarás:
- 250 gramos de harina
- 150 ml de agua tibia
- 5 gramos de levadura
- 1 cucharadita de sal
- Tomate triturado
- Mozzarella rallada
- Rúcula fresca
- Prosciutto en lonchas
- Sal y pimienta al gusto
Una vez que tienes todos los ingredientes listos, puedes comenzar a preparar la pizza. Aquí te dejamos los pasos a seguir:
- En un recipiente, mezcla la harina, la levadura y la sal.
- Añade el agua tibia poco a poco y mezcla hasta obtener una masa homogénea.
- Amasa la masa durante unos minutos, hasta que esté suave y elástica.
- Deja reposar la masa en un lugar cálido durante una hora, hasta que duplique su tamaño.
- Una vez que la masa ha reposado, es hora de darle forma. Puedes estirarla con ayuda de un rodillo o simplemente utilizar tus manos.
- Coloca la masa en una bandeja para horno previamente engrasada.
- Cubre la masa con tomate triturado y mozzarella rallada.
- Añade el prosciutto en lonchas y salpimienta al gusto.
- Lleva la pizza al horno precalentado a 200 grados Celsius durante aproximadamente 15 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente.
- Una vez que la pizza esté lista, retírala del horno y añade la rúcula fresca por encima.
- Sirve caliente y disfruta de esta deliciosa pizza con rúcula y prosciutto.
¡Bon appétit!
Extiende la masa en una bandeja para pizza previamente engrasada
Para comenzar a preparar esta deliciosa receta de pizza con rúcula y prosciutto, lo primero que debes hacer es extender la masa en una bandeja para pizza previamente engrasada. Esto asegurará que la pizza no se pegue y se cocine de manera uniforme.
Ingredientes para el relleno de la pizza:
- 250 gramos de queso mozzarella rallado
- 100 gramos de rúcula fresca
- 100 gramos de prosciutto
- Tomates cherry al gusto
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
Una vez que la masa esté extendida, es hora de preparar el relleno de la pizza. Comienza esparciendo el queso mozzarella rallado de manera uniforme sobre la masa. Asegúrate de cubrir toda la superficie para obtener un sabor delicioso en cada bocado.
Ahora, agrega la rúcula fresca sobre el queso. La rúcula aportará un sabor ligeramente picante y fresco que combinará a la perfección con el prosciutto y el queso mozzarella. Distribuye la rúcula de manera uniforme para que cada porción de pizza tenga un poco de este ingrediente.
A continuación, coloca el prosciutto sobre la rúcula. El prosciutto es un jamón italiano muy sabroso y delicado que le dará un toque gourmet a esta pizza. Puedes desgarrar el prosciutto en trozos más pequeños y distribuirlo de manera uniforme sobre la pizza.
Para agregar un poco de frescura y color, corta algunos tomates cherry por la mitad y colócalos sobre la pizza. Los tomates cherry aportarán un toque jugoso y ácido que equilibrará los sabores intensos del queso y el prosciutto.
Antes de llevar la pizza al horno, rocía un poco de aceite de oliva virgen extra sobre todo el conjunto. Esto ayudará a que la pizza se dore y se vuelva crujiente mientras se hornea.
Finalmente, sazona la pizza con sal y pimienta al gusto. Recuerda que el prosciutto suele ser ligeramente salado, así que tenlo en cuenta al añadir sal.
Lleva la pizza al horno precalentado a 200 grados Celsius y hornea durante aproximadamente 15-20 minutos, o hasta que la masa esté dorada y crujiente. ¡El tiempo de cocción puede variar según el horno, así que mantén un ojo en la pizza para asegurarte de que esté perfectamente cocida!
Una vez que la pizza esté lista, retírala del horno y déjala reposar durante unos minutos antes de cortar y servir. Esto permitirá que los sabores se asienten y la pizza sea más fácil de manejar.
¡Disfruta de esta deliciosa receta de pizza con rúcula y prosciutto en compañía de tus seres queridos! Es perfecta para una cena informal o una noche de películas en casa.
Cubre la masa con salsa de tomate y espolvorea queso mozzarella
Para comenzar a preparar esta deliciosa receta de pizza con rúcula y prosciutto, necesitarás una base de masa de pizza. Puedes hacerla casera o utilizar una masa precocida comprada en el supermercado. Una vez que tengas la masa lista, extiéndela sobre una superficie enharinada y colócala en una bandeja para horno.
A continuación, cubre la masa con una generosa cantidad de salsa de tomate. Puedes utilizar una salsa de tomate casera o una comprada en el supermercado. Asegúrate de esparcir la salsa de manera uniforme por toda la superficie de la masa.
Después de haber cubierto la masa con salsa de tomate, espolvorea queso mozzarella rallado sobre toda la pizza. El queso mozzarella le dará un sabor delicioso y una textura cremosa a tu pizza.
Añade rúcula fresca y prosciutto en lonchas
Una vez que hayas cubierto la pizza con salsa de tomate y queso mozzarella, es hora de agregar los ingredientes estrella de esta receta: la rúcula y el prosciutto.
Coloca hojas de rúcula fresca sobre la pizza. La rúcula le dará un toque de frescura y un sabor ligeramente picante a tu pizza. Asegúrate de distribuir las hojas de rúcula de manera uniforme para que cada bocado tenga un poco de este delicioso ingrediente.
A continuación, añade lonchas de prosciutto sobre la rúcula. El prosciutto es un tipo de jamón italiano muy sabroso y ligeramente salado. Coloca las lonchas de prosciutto de manera estratégica para que cada porción de pizza tenga un poco de este delicioso ingrediente.
Hornea la pizza y disfruta
Una vez que hayas añadido la rúcula y el prosciutto a tu pizza, es hora de hornearla. Precalienta el horno a una temperatura de 200°C y coloca la bandeja con la pizza en el horno durante aproximadamente 15-20 minutos, o hasta que la masa esté dorada y crujiente.
Una vez que la pizza esté lista, retírala del horno y déjala reposar durante unos minutos antes de cortarla y disfrutarla. Puedes servir esta deliciosa pizza de rúcula y prosciutto como plato principal o como parte de una comida compartida.
¡No dudes en experimentar con otros ingredientes y sabores para hacer esta receta aún más personalizada y deliciosa! ¡Buen provecho!
Agrega rúcula fresca y prosciutto en lonchas finas
Si eres amante de la pizza y estás buscando una receta que combine sabores intensos y frescos, ¡esta receta de pizza con rúcula y prosciutto es perfecta para ti! La combinación de la rúcula con el prosciutto, un jamón italiano curado, le dará a tu pizza un toque gourmet y delicioso.
Para empezar, necesitarás una base de pizza clásica. Puedes hacerla casera o utilizar una base prehecha, ¡lo importante es que esté lista para recibir todos los sabores que le agregarás!
Ingredientes:
- 1 base de pizza
- 200g de rúcula fresca
- 100g de prosciutto en lonchas finas
- 150g de queso mozzarella rallado
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
Instrucciones:
- Prepara la base de pizza siguiendo las instrucciones del paquete o utilizando tu receta favorita.
- Una vez que la base esté lista, extiende una capa generosa de queso mozzarella rallado sobre ella.
- Lleva la pizza al horno precalentado a 200°C y déjala cocinar hasta que el queso esté derretido y ligeramente dorado.
- Mientras la pizza se cocina, prepara la rúcula y el prosciutto. Lava y seca la rúcula y corta el prosciutto en lonchas finas.
- Una vez que la pizza esté lista, retírala del horno y distribuye la rúcula y el prosciutto por encima.
- Aliña la pizza con el aceite de oliva y sazona con sal y pimienta al gusto.
¡Y eso es todo! Ahora solo queda disfrutar de esta deliciosa pizza con rúcula y prosciutto. La combinación de sabores y texturas te encantará. Puedes servirla como plato principal o como una opción más para compartir en una comida o cena con amigos. ¡Buen provecho!
Rocía un poco de aceite de oliva por encima de la pizza
Para darle un toque de sabor extra a tu pizza, te recomendamos rociar un poco de aceite de oliva por encima. Esto le dará un sabor delicioso y también ayudará a que los ingredientes se mezclen de manera perfecta.
Hornea la pizza en un horno precalentado a 220°C durante 12-15 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente
Una vez que hayas preparado la masa de la pizza y la hayas extendido en una bandeja para hornear, es momento de agregar los deliciosos ingredientes que le darán sabor y personalidad a tu pizza con rúcula y prosciutto.
Ingredientes:
- 250 gramos de masa para pizza
- 200 gramos de salsa de tomate
- 150 gramos de queso mozzarella rallado
- 50 gramos de rúcula fresca
- 100 gramos de prosciutto
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
Una vez que hayas precalentado el horno a 220°C, coloca la masa de pizza en una bandeja para hornear previamente enharinada. Asegúrate de que la masa esté bien estirada y uniforme.
A continuación, extiende la salsa de tomate sobre la masa de manera uniforme. Puedes utilizar la parte posterior de una cuchara para esparcirla de manera más fácil. Añade sal y pimienta al gusto para realzar el sabor.
Esparce el queso mozzarella rallado sobre la salsa de tomate. Asegúrate de cubrir toda la superficie de la pizza para obtener una capa de queso derretido y delicioso.
Luego, corta el prosciutto en tiras finas y colócalo sobre el queso mozzarella. El prosciutto le dará un toque salado y ahumado a tu pizza.
Una vez que hayas agregado el prosciutto, es el momento de poner la pizza en el horno precalentado. Hornea la pizza durante 12-15 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente.
Mientras la pizza se hornea, aprovecha para lavar y secar la rúcula fresca. Una vez que la pizza esté lista, sácala del horno y coloca la rúcula sobre la superficie caliente. Esto permitirá que la rúcula se marchite ligeramente y libere su delicioso sabor.
Por último, rocía un poco de aceite de oliva sobre la rúcula y disfruta de tu pizza con rúcula y prosciutto recién horneada y llena de sabor. ¡Bon appétit!
Retira la pizza del horno y deja enfriar antes de cortarla y servirla
Una vez que hayas preparado y horneado tu deliciosa pizza con rúcula y prosciutto, es importante retirarla del horno y permitir que se enfríe antes de cortarla y servirla. Este paso es crucial para asegurarte de que la pizza se mantenga en su forma y que todos los ingredientes se asienten correctamente.
Al retirar la pizza del horno, ten en cuenta que estará muy caliente, por lo que es importante tomar las precauciones necesarias para evitar quemaduras. Utiliza guantes de cocina o agarraderas para sostener la bandeja o la piedra de pizza y colócala sobre una rejilla de enfriamiento. De esta manera, el aire podrá circular alrededor de la pizza y ayudará a que se enfríe de manera uniforme.
Es recomendable dejar que la pizza repose durante al menos 5 minutos antes de comenzar a cortarla. Durante este tiempo de reposo, los ingredientes se asentarán y la salsa y el queso se solidificarán un poco, lo que facilitará el proceso de corte y servido.
Una vez que la pizza esté lo suficientemente fría para manipularla sin quemarte, puedes proceder a cortarla en porciones del tamaño deseado. Si estás utilizando una pizza redonda, puedes optar por cortarla en triángulos, comenzando desde el centro y avanzando hacia los bordes. Si estás utilizando una pizza cuadrada o rectangular, puedes cortarla en cuadros o rectángulos.
Recuerda utilizar un cuchillo afilado o una cortadora de pizza para obtener cortes limpios y precisos. Evita presionar demasiado sobre la pizza para no desordenar los ingredientes. Si la pizza tiene una corteza crujiente, asegúrate de aplicar la cantidad adecuada de presión para no romperla.
Una vez que hayas cortado la pizza, puedes servirla en platos individuales o en una tabla para compartir. Acompaña cada porción con utensilios adecuados, como tenedores y cuchillos, si es necesario. ¡Y no olvides disfrutar de esta deliciosa receta de pizza con rúcula y prosciutto junto a tus seres queridos!
Disfruta de una deliciosa pizza casera con rúcula y prosciutto
Si eres amante de la pizza y te encanta experimentar con diferentes sabores y combinaciones, no puedes perderte esta deliciosa receta de pizza casera con rúcula y prosciutto. La combinación de los ingredientes frescos y de alta calidad hará que cada bocado sea una explosión de sabor en tu boca.
Para comenzar, necesitarás los siguientes ingredientes:
- Masa para pizza
- Salsa de tomate
- Mozzarella rallada
- Rúcula fresca
- Prosciutto
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
Primero, extiende la masa para pizza sobre una superficie enharinada y dale forma redonda o rectangular, según tus preferencias. Luego, coloca la masa en una bandeja para horno previamente engrasada.
Ahora es el momento de agregar la salsa de tomate. Espárcela uniformemente sobre la masa, dejando un borde libre alrededor. La cantidad de salsa dependerá de tu gusto personal, pero asegúrate de no poner demasiada para evitar que la pizza se vuelva demasiado húmeda.
Luego, espolvorea generosamente la mozzarella rallada sobre la salsa de tomate. Asegúrate de cubrir toda la superficie de la pizza para obtener una capa de queso derretido y delicioso.
Ahora, es el momento de agregar el toque especial a esta pizza: la rúcula y el prosciutto. Distribuye la rúcula fresca sobre la mozzarella de manera uniforme. La rúcula le dará un sabor fresco y ligeramente picante a la pizza.
Finalmente, coloca las lonchas de prosciutto sobre la rúcula. El prosciutto es un tipo de jamón italiano muy sabroso y delicado que complementa perfectamente el sabor de la rúcula.
Antes de llevar la pizza al horno, condimenta con sal y pimienta al gusto. Esto resaltará los sabores de los ingredientes y le dará un toque extra de sabor a tu pizza.
Lleva la pizza al horno precalentado a 200°C durante aproximadamente 15-20 minutos, o hasta que la masa esté dorada y crujiente, y el queso esté derretido y burbujeante.
Una vez que la pizza esté lista, sácala del horno y déjala reposar durante unos minutos antes de cortarla. Esto ayudará a que los sabores se mezclen y la pizza sea más fácil de cortar sin que se desmorone.
¡Y listo! Ahora puedes disfrutar de esta deliciosa pizza casera con rúcula y prosciutto. Sirve caliente y acompaña con una ensalada fresca o una copa de vino tinto. Estamos seguros de que esta combinación de sabores te encantará y se convertirá en una de tus pizzas favoritas.
Preguntas frecuentes
1. ¿Cuánto tiempo tarda en cocinarse la pizza?
La pizza tarda aproximadamente 15-20 minutos en cocinarse en un horno precalentado a 200°C.
2. ¿Puedo utilizar otro tipo de queso en lugar del prosciutto?
Sí, puedes usar mozzarella, queso de cabra o cualquier otro queso que prefieras en lugar del prosciutto.
3. ¿Es necesario precalentar el horno antes de cocinar la pizza?
Sí, es importante precalentar el horno para asegurar que la pizza se cocine de manera uniforme y obtenga una corteza crujiente.
4. ¿Puedo agregar otros ingredientes a esta receta de pizza?
¡Claro! Puedes personalizar esta receta agregando ingredientes como champiñones, aceitunas o pimientos según tu preferencia.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
Entradas relacionadas